martes, 26 de mayo de 2015

El peso de una corona

Bienvenidos a mi salón,

Hace mucho que no comento ningún libro, por lo que hoy os voy  a hablar de uno que cuenta historias de la Historia, donde las niñas se casan con príncipes, pero no son tan felices ni comen perdices.

Nacen siendo unas niñas inquietas, divertidas, con ideas propias, creativas, soñadoras y sobre todo libres.

Su condición social las obliga a casarse, a renunciar a su propia vida, para vivir una vida inventada.
Unas mujeres que hicieron historia, que intentaron sobrevivir en una sociedad que no las comprendía, donde se las utilizaba como moneda, donde nadie las preguntaba, donde solo importaba que dieran un heredero, fueron niñas felices y las convirtieron en mujeres desdichadas, sufridoras y desengañadas.
Tuvieron que crearse su propio universo para poder sobrevivir en una sociedad que solo las quería para que lucieran en los salones, saludaran con elegancia y parieran herederos.
Sufrieron el desamor, el desengaño, el desprecio por sentirse extranjeras y lloraron la pérdida de sus hijos.

Cristina Morató no trae, "Reinas malditas".

Nos cuenta las historias de seis reinas, de las que muchas sabemos que fueron muy bellas, y que nos pintan una vida llena de lujo y elegancia, pero la realidad fue muy distinta.

Sisí Emperatriz
Sisí Emperatriz, la primera de ellas, lo primero que nos viene a la memoria es la película protagonizada por Romy Schneider, en la que vemos una bella jovencita, políticamente activa y comprometida. Pero la realidad fue mucho más cruel,Sisi, vivió esclava de su belleza, luchando por no envejecer, una mujer muy culta, amante de los animales y la vida al aire libre, le gustaba viajar, y era capaz de caminar durante horas. Todo ello chocó con la rigurosa etiqueta del Imperio.







Cristina de Suecia
Cristina de Suecia, destacó por su carácter fuerte e inteligente, poco agraciada físicamente y muy extravagante, poco atraída por las joyas y aficiones femeninas, se vestía como un hombre y su lenguaje era poco elegante, pero no por ello menos culto. Luchó contra una sociedad que buscaba reinas hermosas y dóciles, ella impuso su carácter y personalidad, no exento de extravagancias.









María Antonieta
María Antonieta, bella joven e inteligente, vivió en una corte que no la quería, casada con un hombre débil e infiel. Mucho se habló de ella, por su comportamiento de despilfarro y lujo, e incluso se le atribuyeron muchos amantes, pero ella luchaba por agradar a su pueblo, de ser querida y aceptada. Algo que nunca consiguió, de ahí el trágico final que el destino le tenía reservado.










Alejandra Romanov e hijas
Alejandra Romanov, destacó por su carácter fuerte y gran timidez, y por su influencia en el gobierno de su esposo, el Zar Nicolás II, con el que se casó por amor.
Marcada por la tragedia, tuvo cinco hijos, pero el único varón nace con hemofilia. Confía plenamente en Rasputín, el polémico personaje al que se le atribuyen varias sanaciones.
Las malas influencias y consejos, hacen que ella y su familia sean ejecutados.






Eugenia de Montijo
Eugenia de Montijo, "la Española". Acusada como María Antonieta de frívola y superficial, fue una mujer bella, inteligente, inquieta, y luchadora, que se involucró en la política, defensora de los derechos de las mujeres, preocupándose por la educación de las niñas. Sufrió varias tragedias familiares, perdiendo a su madre, a su hermana con la que estaba muy unida, a su marido y por último a su único hijo en el campo de batalla. Todo ello hizo que al final de sus días se sumiera en una profunda melancolía, dedicándose a viajar, de manera errante.






Victoria de Inglaterra
Victoria de Inglaterra, subió al trono siendo muy joven, pero sorprendió por sus madurez y sensatez. Muy enamorada de su marido, tuvo nueve hijos, y destacó por su labor política, dando nombre a una época. Enviudó siendo aún joven, y al estar muy enamorada de su marido, no logró recuperarse nunca.
Su reinado duró casi 64 años. Casi todo un siglo. Donde el cambio y el progreso marcó su reinado.







Seis mujeres, marcadas por el destino, obligadas por nacimiento a vivir la vida de otros, unas fueron felices, otras sufrieron toda la vida, pero ninguna pudo escoger libremente.
¿Realmente son princesas de cuento? En realidad, fueron princesas y bien pensado vivieron un cuento, pero no de hadas.
Y recordad dadle alas a la escoba!




No hay comentarios:

Publicar un comentario

Deja tu comentario, gracias por tu aportación